Exiliados Unionistas: "El ambiente que se respira en la grada de Unionistas es algo que yo nunca he visto en la Unión Deportiva Salamanca"

Exiliados Unionistas es la peña más antigua del club popular salmantino. De hecho, su fundación se dio antes de que el equipo tuviese algún jugador. Exactamente, el nacimiento de esta peña fue el julio de 2014 en Leganés, un año después de la fundación del club y un mes antes de que este saliese a competir en regional. Actualmente tienen sede en Madrid y en Valladolid, ya que su esencia es reunir a socios de Unionistas que no residan en Salamanca. Jorge García, su presidente, nos cuenta todo tipo de anécdotas, curiosidades y sucesos desde ese verano de hace seis años hasta ahora.

En Madrid siempre hubo muchos aficionados de la Unión Deportiva Salamanca, pero nunca se había llegado a crear una peña. Jorge se muestra orgulloso al haber conseguido "juntar una buena colonia para un equipo de provincial". No solo fueron la primera peña del club, también acudieron al primer encuentro de Unionistas de Salamanca, en un partido amistoso en Santa Marta de Tormes. 

¿Cuántos socios erais al principio?

El primer año, que yo recuerde, unos 10-12. En la primera toma de contacto fuimos cuatro o cinco personas, pero fue aumentando y cuando hicimos oficial la peña nos reunimos nueve, aunque faltarían tres o cuatro personas por venir. Por lo que en total eso, unos 12. 

¿Y actualmente?

Unos 92 o algo así. Ahora ya estamos repartidos por toda la geografía. Como filosofía tenemos ser una peña con presencia en todas las provincias de fuera de Salamanca. Queremos reunir a toda esa gente que está dispersa por distintos puntos del país. En Valladolid tenemos un núcleo bastante importante después del de Madrid, allí son más de 20 personas. 

Tenéis sede en Madrid y Valladolid, ¿estáis dispuestos a abriros a otras ciudades?

Sí, es parte de nuestra filosofía. El requisito es que haya seis socios adultos en el lugar para poder crear una sección. El objetivo es tener varias secciones. Cuanta más gente podamos aglutinar mejor, porque habrán más posibilidades de organización. 

¿En qué provincias crees que os podéis expandir?

Es difícil, porque las dos provincias de Salamanca con más aficionados de Unionistas son principalmente Madrid y Valladolid, por lo que es más complicado ya que en otras provincias el número de socios no es tan alto. Fuera de nosotros hay otra pequeña peña en el País Vasco que reúne a una decena de socios. Las provincias en las que ha habido más migración desde Salamanca, sobre todo a finales de los 80 y principios de los 90, son Madrid, País Vasco, Barcelona y Valladolid. Paradógicamente, en Barcelona no tenemos a nadie. Tenemos aficionados en Navarra, Asturias, Zaragoza, Ávila, Ciudad Real, A Coruña y Burgos.

¿Socios en Salamanca tenéis?

Ahora mismo no, pero el año pasado sí que tuvimos un par de ellos. Pero han sido por circunstancias de gente que estaba viviendo fuera y ha vuelto a Salamanca pero no se ha deshecho de la peña. Gente que se haya hecho socia de nuestra peña viviendo en Salamanca ya no, no tendría sentido. Si se diese el caso no nos importaría, pero en Salamanca ya hay otras peñas.

¿Viajáis cada fin de semana para ver a Unionistas?

Intentamos, por lo menos, en los partidos más importantes. Nos organizamos con los coches para compartir gastos y demás. Pero de normal hay gente que viviendo aquí va a muchos partidos, incluso a los desplazamientos y todo. Cuando mejor nos organizamos es para partidos relevantes: el primer partido en casa, los play off de tercera, cuando hay un ascenso en juego, etc. 

¿Cómo se lleva el sentimiento desde la distancia?

Es diferente pero muy especial, sobre todo cuando vamos al campo. Cuando vamos como locales no es como para la gente que va siempre, para mí es una experiencia enorme. Es más pasional, estás más metido en el partido y lo vives de un modo más especial y diferente porque ya te implica muchas cosas. Es el volver a tu tierra, ver a mucha gente que normalmente no ves, etc. También es verdad que muchos de nosotros tenemos experiencia porque llevamos muchos años fuera de Salamanca, por lo que es algo que ya nos pasaba con la Unión. Ahora se pueden seguir los partidos por footers, pero es mucho mejor ir allí. Eso es lo mejor, la forma de vivirlo, tener con la peña el grupo de WhatsApp para poder hablar de fútbol... Antes no sabías con quien hablar, porque todo el mundo es del Barça, del Madrid y aquí alguno del Atlético de Madrid. No podías hablar con nadie de la Unión, por lo que para nosotros esto es perfecto, podemos comentar los fichajes, los viajes, etc. 

Ahora con footers es fácil seguir al equipo, cuando la Unión militaba en Segunda División también, pero, ¿cómo seguíais al equipo cuando estaba en categorías regionales?

El primer año escuchando Ser Salamanca, que desde el primer partido los ha emitido todos salvo uno contra el Burgos y alguno contra el Salmantino porque no les dejaron entrar. Pero salvo esas excepciones, desde el primer partido en provincial hemos seguido al equipo desde allí, a través del locutor Ricardo Montilla. También nos hemos apoyado mucho en el club, que siempre ha hecho el seguimiento de los partidos. 

Imagino que Ser Salamanca es la emisora más afín que tenéis a Unionistas...

Sí, la verdad es que sí. Por otro lado está la Cope, pero allí es bastante descarada su afinidad por el Salmantino. Está claro para donde se barre en cada una de las emisoras, unos con mayor virulencia que otros como en el caso de la Cope, pero así está la cosa. 

¿Cómo se financia la peña?

Tenemos una cuota anual de 15 euros para los mayores de 18 años y de cinco euros para los menores de edad. Como tampoco tenemos muchos gastos, nunca hemos acudido a las ventas de merchandishing. Hemos sacado alguna bandera, bufanda y demás, pero son exclusivamente para los peñistas, no se ponen en venta. También realizamos algún concurso de recuerdo a la Unión todos los años.

¿Que relación tenéis con otras peñas del club? ¿Estáis en contacto permanente?

Sí, formamos parte de la FPU (Federación de Peñas de Unionistas). Es una aventura que empezó en 2017 y en ese momento solo existíamos un par de peñas, nosotros y USCF Fans, que fuimos los fundadores y además éramos de los más animosos de la grada. Ahora mismo la federación está compuesta por nueve peñas y tenemos mucho contacto. Los presidentes de cada peña estamos en un grupo para organizar distintas iniciativas. Yo en concreto estoy en la directiva de la federación, antes como vicepresidente y ahora como secretario. Más allá de los kilómetros de distancia que hay, tenemos una relación bastante cercana. El rollo de los peñistas es bastante bueno, y aunque haya muchísimas, peñas, todos somos del mismo barco. 

¿No hay distintas ideologías dentro de las peñas?

Hay alguna peña que sí que se sitúa un poco más ideológicamente, pero que no está en la federación. Las sí estamos, seguimos un poco la línea del club del apoliticismo. Es algo que me parece bastante positivo, porque se demuestra la gran capacidad que tenemos en las peñas para ponernos de acuerdo. Es una experiencia muy positiva. 

El año pasado estabais con equipos madrileños en Segunda División B, pero esta temporada ya no es así. Imagino que fue una desilusión para vosotros, ¿no?

Sí, el año pasado estábamos encantados. Teníamos siete u ocho partidos en Madrid y luego siempre te podías acercar a alguno a Salamanca, que está aquí al lado. Se nos presentó un panorama genial, íbamos a ver mucho más fútbol que los otros años. Ha sido un fastidio para nosotros a nivel de club porque supone muchos más gastos en desplazamientos más largos y a nivel de aficionados ha sido una puñeta, aquí estábamos en la gloria. 

¿Aquí os sentíais como en casa? ¿Erais una especie de anfitriones?

Sí, un poco sí que era así. Era un poco raro, porque estás aquí viviendo, viene Unionistas de visitante y casi como que eres el local. Alguna vez se dio la situación de que un compañero que vivía justo en la zona del equipo contra el que jugábamos, y es curioso. Otro peñista que es del Atleti y a veces iba a ver al Atleti B y de repente va a ver a Unionistas... La primera vez que jugamos en Madrid fue en un amistoso contra el Unión Adarve e hicimos una pancarta de "Bienvenidos a Madrid", nosotros ya estábamos viviendo aquí y le dábamos la bienvenida al equipo visitante, fue algo muy simpático y positivo.

Por ejemplo, el año pasado fuisteis muchos a Majadahonda en el partido frente al Atleti B. 

Sí, el año pasado fuimos un porrón. Pero el mayor desplazamiento fue el de Valdebebas contra el Real Madrid Castilla, yo creo que ayudó bastante que fuese el primer partido. También, creo que la entrada eran cinco euros más barata que para el Atleti B. 

¿Solíais ser más aficionados visitantes que locales?

Yo creo que en los partidos en Madrid sí. En San Sebastián de los Reyes, por ejemplo, fue exagerada la diferencia que hubo entre nosotros y la afición local, fue una barbaridad. Contra el Fuenlabrada ya no, allí ellos serían más, pero tampoco nos pasaron por mucho. Contra Real Madrid Castilla y Atleti B fuimos más, allí la gente también se suele desplazar mucho. Y luego también en partidos como el de Navalcarnero, Internacional de Madrid... Creo que salvo en Fuenlabrada, en Madrid siempre fuimos más. 

¿Por qué crees que Unionistas mueve a tanta gente fuera de casa?

Es la esencia del club, que es muy diferente a todos los demás. Es que lo sentimos como muy nuestro, porque es literalmente así. Este club llegará hasta donde los socios estén dispuestos a llegar. Por supuesto, sin los patrocinadores no sería viable que estemos en Segunda División B, pero es que esto es muy nuestro. Por lo tanto, si no vas a animar a lo tuyo, ¿qué vas a hacer? Es la forma de vivirlo, el ambiente que se respira en la grada de Unionistas es algo que yo nunca he visto en la Unión Deportiva Salamanca. Es muy familiar, muy cercano, muy alegre, e ir a disfrutar del partido pese a todo, pese al resultado. El ambiente que se genera y como engancha. Hemos desarrollado una filosofía que hemos seguido muy fielmente y que provoca que al llegar el fin de semana tengas unas ganas locas de ir a ver a tu equipo. También influye que la gente está muy implicada para los viajes y desplazamientos. Yo creo que es por eso, hay mucho sentimiento de pertenencia. 

¿Tenéis relación con otras peñas de equipos populares?

Sobre todo, aunque sea más por parte de USCF Fans, con los del Logroñés (el popular, no el malo). También hay muy buena relación con el Ciudad de Murcia, un equipo que siempre está muy atento del resto de clubes populares, siempre son los primeros en apoyarte. Sobre todo me gustaría destacar que dejamos buena imagen en las aficiones rivales, ya nos hemos acostumbrado a que nos lleguen halagos debido a nuestro comportamiento. A veces nos sorprende que tener un comportamiento normal y cívico no parezca normal, pero sabemos que en el fútbol no siempre es así. 

Quizá ese civismo fue un poco lo contrario a lo que vivisteis en el derbi en Las Pistas esta temporada, ya que la zona visitante quedó bastante mal, ¿no?

Tampoco quiero generalizar, porque quizá lo de dejarlo sucio fue cosas de todos, pero los que hicieron desperfectos en las papeleras en unas instalaciones públicas, que no son nuestras, o pusieron pegatinas, fueron la afición ultra que tiene esta gente. Entre los cuales, se encuentran personas que estuvieron en Unionistas y se les echó por realizar un altercado en un partido. Hay gente que viene de Brigadas Charras que era el grupo ultra que tenía la Unión Deportiva Salamanca, y empezaron en Unionistas. Ahora son nuestro mayor enemigo, los que más caña nos dan por redes sociales, etc. A esta gente, como se les retiró el carnet, cogieron la rabieta, como procede de gente con su ideología y se fueron a animar al Salmantino. Montaron una peña que no tuvo mucho éxito, pero con la adquisición del Helmántico se han hecho un poco los jefes del cotarro en cuanto a animación. Los destrozos que hubo, en gran parte, fueron por parte de esta peña. 

Esta gente pasó del bando de Unionistas al del Salmantino, ¿sabes algún caso que haya sido al revés?

No caigo, pero es que también es difícil porque cuando empezó Unionistas a andar, nosotros pasábamos de los 2000 socios en provincial y en ese momento ellos estaban compitiendo de forma fradulenta en tercera. Haciendo la triquiñuela con una cosa que era la Fundación Unión Deportiva Salamanca, que pretendía usar la cantera del Salamanca y tal. Fue una cosa irregular que conllevó que se les descendiesen administrativamente a provincial posteriormente. En ese año, ellos jugaban curiosamente en Las Pistas e iban poco más que los familiares de los jugadores. Hay instantáneas de la época en las que había 50 personas en los partidos, y se sabe que eran los familiares porque Salamanca es un pueblo. Cuando la gente se empieza a animar y se compró el Helmántico, la gente se empezó a sumar al barco. En definitiva, yo no conozco ningún caso aunque alguno habrá, pero es difícil básicamente porque ellos han empezado después. La gente que ha seguido al Salmantino, antes de que tuviesen el Helmántico han tenido la oportunidad de venirse a Unionistas, por lo que no se van a ir ahora. 

¿Han sido un poco 'subecarros'?

Sí, es gente que entiende que el fútbol se debe ver en un estadio. Sí Unionistas hubiese tenido el Helmántico, toda esa gente que se subió al carro del Salmantino, a lo mejor hubiese estado con nosotros. Veremos si con este nuevo proyecto del Estadio Reina Sofía, que es un campo municipal que nos están remodelando, notamos una subida de socios. Sería lo bueno de tener un campo con asientos, techado, etc. Quizá incluso se suma gente del barrio, porque este estadio se va un poco a las afueras, pero no tanto como estamos ahora. Es en el barrio San José de Salamanca. 

¿Cómo te sentirías si no se hubiese llegado a fundar Unionistas?

Cuando desapareció la Unión Deportiva Salamanca me planteaba la vida sin fútbol. He pasado toda la vida en Madrid, llevo casi 30 años aquí y tengo 34. He sido toda la vida del Salamanca, otros compañeros quizá son del Madrid o del Atleti, pero yo no. Por lo tanto, con la desaparición del equipo lo viví con mucha pena, ya no solo por la relación pasional que tienes con el fútbol, sino porque te hace conectar con la ciudad de Salamanca. No me planteaba seguir ningún otro equipo, por lo que me ha dado Unionistas es la oportunidad de disfrutar de un formato de fútbol que siempre he querido, el fútbol popular. Me parece la mejor manera de vivir el fútbol, y con los pocos años que lleva en Salamanca, lo estoy viviendo de manera mucho más pasional de lo que fue con la Unión.

¿Cuál es el peor momento que has vivido desde que se fundó el equipo en 2013?

El peor yo creo que fue el primer derbi en el Helmántico con el Salmantino, que ahí sí fuimos. La única vez que hemos ido, ya no hemos vuelto. Fue el peor momento pero no por perder, que perdimos, sino por la sensación tan rara de estar en nuestra casa como visitantes. Se me ha quedado grabada la cara de algún peñista nuestro que tiene más de 60 años y ha sido de la Unión toda la vida, y ver como se sentían, los nervios, etc. También, el trato que se nos dispersó, como utilizaban el escudo de la Unión cuando aún no lo tenían comprado, la forma de apagarnos las luces al final del partido, ponernos música atronadora para tratar de que no se nos oyese animar, etc. También, el lugar en el que dejaron en el palco a nuestro presidente, en una esquinita. Todos esos detalles que sabes que no son casuales. Ese fue el peor momento por como nos sentimos. 

¿Y el mejor?

Y el mejor fue el momento del gol del ascenso a Segunda B. Yo lo viví conduciendo, y cada vez que paso en coche por ese tramo de carretera, me acuerdo. Fue un momento espectacular. Aparte de eso, todos los partidos en casa, cuando te juntas con tu peña son momentos espectaculares. 

¿Cómo ves las opciones de salvación esta temporada?

Con todo el rollo este, ya no sé ni que pensar. Antes de todo esto estaba convencido de que nos salvábamos. En algunos partidos hemos tenido algún bache, pero creo que lo hubiésemos solventado. Tengo confianza en los jugadores y en el entrenador. Yo creo que nos hubiésemos salvado, a ver que pasa ahora con toda esta situación, pero yo confío. Por regla general, siempre hemos confiado y tenemos mucha fe. Lo peor que hemos vivido es la desaparición de la Unión Deportiva Salamanca, eso sí que fue un palo, por lo que ya estamos curados de espanto.