La tarde del sábado se presentaba con el enfrentamiento más comprometido de la temporada para la UD Ourense. El ambiente en las gradas de o Couto era el propio de los días grandes, una cantidad de personas exagerada para un partido de esta categoría llenaba de vida los asientos para ver cómo se desafiaban los campeones de los grupos del sur de la preferente gallega.

Ambas plantillas saltaron al verde sabiendo que el rival que tenían en frente podía hacerles mucho daño en sus aspiraciones por el ascenso a tercera, es por eso que en los primeros 30 minutos no se acumularon grandes ocasiones y se pudo ver una pelea en el medio campo por el dominio del control del partido. A pesar de ello, en el minuto 8 una combinación desafortunada de los jugadores del Gran Peña en su propio campo permitió a Gabi Sanín recuperar el esférico a 20 metros de la portería rival con un par de defensores por delante y, mientras Hugo García se desmarcaba para arrastrar al primero, el propio Gabi regateaba al rival que le salía al paso, sentaba al portero con un recorte y tiraba una vaselina para poner el 1-0 en el marcador con un tremendo golazo.

El equipo unionista conseguía no sufrir ningún susto en la primera media hora de encuentro, el plan a seguir estaba claro, tratar de dominar al rival mediante la circulación veloz del balón. Y, después de un intento de ataque del Gran Peña por su banda izquierda, llegaría una de las mejores actuaciones individuales del encuentro: el lateral derecho ourensanista, Varo, robaba el balón en campo propio y conducía en diagonal hacia la frontal del área visitante; tras una triangulación de pases y un par de tiros bloqueados por la defensa bajo palos, el rechace le caería al propio Varo para marcar el segundo gol de la tarde. El jugador nacido en Vigo se golpeaba el pecho y en una celebración conjunta, llena de rabia, los jugadores de campo transmitían la importancia de este encuentro para el equipo.

Antes de irse al descanso la UD Ourense dispondría de otra ocasión en las botas de Champi que disparaba muy desviado. El árbitro pitaba el final de los primeros 45 minutos y la sensación de superioridad  rojilla era evidente.

La segunda mitad comenzaba con cambios en los jugadores del Gran Peña, en un intento de reengancharse al encuentro que tendría su efecto en el primer minuto de juego cuando, tras una carrera por banda derecha, el jugador visitante buscaba un pase atrás que encontraría receptor en el punto de penalti, pero el delantero no conseguía acertar en el remate y el balón se marchaba por encima del larguero.

Poco duraría el dominio visitante, antes de cumplirse la hora de juego, el equipo de as burgas estuvo a punto de encontrar el gol a la salida de dos saques de esquina consecutivos. En el primero, Villa remataba en el palo corto y el portero con una muy buena estirada sacaba el balón de la escuadra y, acto seguido, Viti cabeceaba un balón cruzado buscando el segundo palo enviando el balón muy cerca del poste.

Cinco minutos más tarde, Villa volvería a gozar de una buena ocasión a balón parado tras controlar en el segundo y rematar obligando a que el portero interviniera con una parada más propicia de un partido de balonmano, digna de los mejores guardametas alemanes.

El partido terminaría de morir cuando, en una contra de la UD Ourense en la que Hugo García bajaba su enésimo balón jugando de espaldas a la portería rival y, tras triangular con otros compañeros, en el momento en el que Melo se disponía a pisar área para enfrentarse en un mano a mano con el portero, uno de los centrales visitantes cortaba la jugada con una entrada que le supondría la tarjeta roja.

A partir de esta jugada el partido cambió de intensidad, los jugadores del Gran Peña se veían superados en todos los duelos y lo único que les quedaba era replegarse para no sufrir una derrota más abultada. Cuando el colegiado estaba a punto de pitar el final del tiempo reglamentario, Isi, que acababa de entrar al partido, recibía un balón en la frontal y, después de sobrepasar a dos rivales con dos movimientos técnicos exquisitos, ponía el 3-0 final. El banquillo se echaba encima del propio Isi para festejar la victoria y su contribución al resultado en un gran gesto de cariño que, sin duda, es de los que hacen piña.

La Unión Deportiva Ourense termina la primera vuelta de esta fase de ascenso con un partido muy serio en todos los aspectos, sin sufrir y abriendo la brecha con sus perseguidores en la clasificación. Gran parte de culpa de que el partido fuera "tan sencillo" es de los goleadores Gabi y Varo que realizaron ambos un grandísimo encuentro, siendo superiores cada uno sobre sus marcadores. También hay que dar méritos a los centrales Corzo y Villa, capaces de secar a dos delanteros que acumulaban conjuntamente 35 tantos en 27 jornadas.

Con este resultado se consigue dar un pasito más hacia el ascenso: El Gran Peña actualmente se encuentra segundo a 6 puntos a falta de que jueguen este domingo Portonovo, Barbadás y Pontevedra B. En el peor de los caso se seguiría 5 puntos por encima del 3º puesto, que marca el límite del ascenso. 

Quedan 5 finales por disputar.